Juan 3:16
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
Juan 14:6
Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.
Juan 3:3b
El que no naciere otra vez, no puede ver el reino de Dios.
Juan 1:12
Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios.
Revelación 3:20
He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oyere mi voz y abriere la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.
Romanos 3:23
Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios;
Efesios 2:8-9
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe, y esto no de vosotros; pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.
Juan 3:36
El que cree en el Hijo tiene vida eterna; mas el que es incrédulo al Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él.
Juan 10:27-28
Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen; y yo les doy vida eterna, y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano.
Hechos 4:12
Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre debajo del cielo, dado a los hombres, en que debamos ser salvos.
Mateo 18:3
No os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos.
Romanos 6:23
Porque la paga del pecado es muerte; mas el don de Dios es vida eterna en Cristo Jesús nuestro Señor.
1 Juan 1:9
Si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.
Hechos 16:31
Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo tú, y tu casa.
2 Corintios 5:17
De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.
Juan 6:37
Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, yo no le echo fuera.
Tito 3:5
Nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hayamos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y de la renovación del Espíritu Santo;
Romanos 10:9-10,13
Si confesares con tu boca al Señor Jesús, y creyeres en tu corazón que Dios le resucitó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, mas con la boca se hace confesión para salvación. Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.